HISTORIA EN BREVE

  • Los gatitos con el “síndrome del gato tambaleante” (hipoplasia cerebelosa) pueden llevar una vida sana y feliz con humanos que se adapten a sus necesidades especiales
  • Los gatitos nacen con esta rara afección que se desarrolla en el útero y por suerte no es progresiva; los signos clásicos son la falta de coordinación al estar de pie o al caminar, y movimientos bruscos de la cabeza al comer o beber
  • Existen muchas cosas que los cuidadores pueden hacer por los gatos tambaleantes para que sus entornos sean más fáciles de sobrellevar; también es importante brindarles mucho enriquecimiento ambiental y de preferencia un acceso seguro al aire libre cuando el clima lo permite

Por la Dra. Karen Shaw Becker

Dado que la naturaleza misma de los felinos es ser ágiles y graciosos en sus movimientos, los gatitos con una rara afección llamada hipoplasia cerebelosa, o "síndrome del gato tambaleante", son pequeños atípicos y adorables. Por suerte y a pesar de su enfermedad, estos gatos pueden vivir vidas felices, saludables y normales, en especial cuando sus humanos comprenden y se adaptan a sus necesidades especiales.

Causas del síndrome del gato tambaleante

La hipoplasia cerebelosa es una afección médica en la que la parte del cerebro responsable del equilibrio y la coordinación, el cerebelo, no se desarrolla de forma correcta.

"Esto resulta en gatos que tienen movimientos exagerados de las patas y la cabeza, ya que, por lo general, esos movimientos están controlados por el cerebelo", explica el Dr. Joseph Mankin, profesor clínico asociado de neurología en la Facultad de Medicina Veterinaria y Ciencias Biomédicas de Texas A&M.

La afección es más frecuente cuando una gata preñada contrae el virus de la panleucopenia felina (moquillo felino) y lo transmite a sus gatitos en el útero. El virus ataca el cerebelo en desarrollo en uno o más gatitos y hace que no se desarrolle de forma correcta. También se especula que algunos casos del síndrome del gato tambaleante son el resultado de la exposición a toxinas ambientales, infecciones y deficiencias alimenticias.

Este síndrome está presente al nacer y, por lo general, no empeora. Por lo que, si un gato sin la afección se tambalea o pierde el equilibrio, o si un gato con la afección demuestra síntomas que empeoran poco a poco, es necesario llamar a un veterinario, ya que estas son señales de que sucede algo más.

Síntomas de hipoplasia cerebelosa

El principal signo clínico del síndrome del gato tambaleante es la falta de coordinación (ataxia) al pararse o caminar, junto con movimientos bruscos de la cabeza al comer o beber. Otros síntomas comunes incluyen:

Temblores de cuerpo y extremidades

Movimientos de la cabeza

Balancearse al caminar

Dificultad para calcular distancias

Problemas de equilibrio

Pesadez

La afección no es contagiosa y aunque no existe tratamiento ni cura, por lo general no causa efectos graves ni dañinos.

“Estos gatos pueden vivir vidas largas y saludables; solo se ven un poco raros cuando caminan”, dice el Dr. Mankín. “A medida que crecen, pueden aprender a compensar su disfunción cerebelosa y, aunque sus signos clínicos no desaparecerán, podrían mejorar mucho”.

Los gatitos con el síndrome del gato tambaleante no requieren medicamentos ni cuidados adicionales. Solo necesitan pequeños cambios en su entorno que los hagan más seguros para moverse como otros gatos y humanos que pueden ser pacientes con un gatito que se mueve un poco más lento que la mayoría. Deben ser mascotas que solo vivan dentro de casa y, de preferencia, con acceso seguro y protegido al aire libre siempre y cuando el clima lo permita.

Cómo hacer que su entorno sea apto para gatos con el síndrome

Si a tu gatito o gato le acaban de diagnosticar hipoplasia cerebelosa, existen varias cosas que puedes hacer para que su vida sea más fácil y manejable, al mismo tiempo que lo mantienes a salvo. Las recomendaciones de la asociación caritativa Cats Protection incluyen:

Una caja de arena con lados altos. Este tipo de caja de arena no solo debería ayudar a tu gato a sentirse menos vulnerable mientras hace sus necesidades, sino que también puede usar los lados altos de la caja para equilibrarse. Asegurarse de que haya mucha arena en la caja evitará que se vuelque cuando entre y salga.

Tazones resistentes y pesados para comida y agua. Los gatos tambaleantes a menudo comen de manera desordenada debido a su falta de coordinación, por lo que es mejor poner su comida y agua en tazones resistentes y pesados que no se muevan ni se vuelquen tan fácil. Recomiendo tazones para su comida y agua fabricados con acero inoxidable, porcelana o vidrio. Es importante comprar acero inoxidable de calibre 18, y de preferencia a través de una empresa que haya realizado pruebas de pureza de terceros.

Algunos tazones de porcelana pueden contener plomo, mientras que otros no se han aprobado para su uso con productos alimenticios, así que debes asegurarte de comprarlos en una empresa de confianza, que la porcelana sea de buena calidad y que se hayan elaborado para contener alimentos. Los tazones de vidrio de Pyrex o Duralex son mis favoritos, ya que son resistentes y no contienen tóxicos, a diferencia de otros productos de vidrio fabricados a bajo costo que pueden contener plomo o cadmio. También es mejor alimentar a tu gato en tapetes (y pisos) que puedas limpiar fácilmente.

Acceso a perchas altas. Los gatitos con hipoplasia cerebelosa corren, saltan y juegan como otros gatos. Y como a otros gatos, también les gusta trepar a perchas altas cuando se sienten estresados o quieren una vista panorámica de su entorno. Piensa en formas de hacer que esta actividad sea más segura para tu gato, por ejemplo, al colocar una silla u otro "ayudante de salto" frente a su ventana favorita.

Utiliza escaleras para mascotas o una otomana para que el gatito no tenga que saltar para alcanzar el sofá o la cama. También considera colocar almohadas en el piso debajo de su percha de ventana favorita o árbol para gatos para amortiguar los aterrizajes menos que elegantes. Restringe el acceso a áreas inseguras, especialmente si son muy altas.

Pisos antideslizantes. Para los gatos tambaleantes, los pisos alfombrados son preferible a los pisos duros, pero las alfombras individuales que se mantienen colocadas estratégicamente sobre pisos de madera, laminado o baldosas pueden ser una alternativa viable al piso alfombrado.

Enriquecimiento ambiental. Dado que los gatos con hipoplasia cerebelosa deben permanecer en el interior, y como todos los gatitos que solo viven en el interior, necesitan un entorno enriquecido que estimule todos sus sentidos. Ya he discutido algunos de estos, pero para obtener información mucho más detallada, lee mi artículo: “5 cosas fundamentales que las mascotas necesitan para prosperar”.