📝    HISTORIA EN BREVE

  • Un mal adiestramiento es una de las causas principales por las que muchos perros terminan en un refugio o los dueños recurren a un veterinario por problemas de comportamiento
  • Aunque el momento ideal para comenzar a adiestrar a un cachorro es entre las 7 y 8.5 semanas, al final, la edad no importa, ya que se puede adiestrar a cualquier perro, siempre y cuando el dueño sea constante, positivo y paciente
  • Hay cuatro reglas básicas para el adiestrar a un perro: 1) jamás dejes solo a un perro sin adiestrar, esto significa no perderlo de vista ni un segundo; 2) establece horarios para alimentarlo (no debe tener acceso libre a la comida); 3) recompensa a tu perro por su buen comportamiento; 4) no lo castigues cuando se equivoca
  • Te recomiendo que utilices señales verbales para adiestrar a tu perro, de ese modo podrás darle una señal para hacer sus necesidades, sin importar si están en casa o en cualquier otro lugar

🩺 Por la Dra. Karen Shaw Becker

Por desgracia, un mal adiestramiento es una de las causas principales por las que muchos perros terminan en un refugio o los dueños recurren a un veterinario por problemas de comportamiento.

Creo que aquí el problema real es que los dueños tratan a su perro como si fuera un humano pequeño y peludo. Si una mascota tiene un accidente y hace sus necesidades adentro de la casa, reaccionan como si lo hubiera hecho una persona. Si bien es cierto que los perros forman parte de nuestra familia, no son humanos, y las personas reaccionan de esta forma a este tipo de accidentes, muchas veces el resultado es el contrario al deseado y la situación se vuelve cada vez peor.

Los perros tienen que hacer sus necesidades y cuando llevas un cachorro a casa por primera vez es natural que lo haga cuando siente la necesidad, sin importar el lugar en el que se encuentra. Para que eso cambie, primero, tu perro debe tener edad suficiente para controlar la necesidad de forma fisiológica y, segundo, debes enseñarlo a orinar y defecar fuera de casa. Estos son los dos aspectos básicos para adiestrar a un perro.

La buena noticia es que es posible adiestrar a cualquier perro, sin importar su edad. Aunque es más fácil adiestrar a un cachorro, también es posible hacerlo con un perro adulto.

Creo que es muy importante que los dueños entiendan que hay tres factores que les hará las cosas más fáciles al momento de adiestrar a su perro: la constancia, el refuerzo positivo y la paciencia.

El mejor momento para adiestrar a un cachorro

Debes comenzar a adiestrar a un cachorro desde el primer día que llega a casa. Pero, es importante recordar que, al igual que los bebés, los cachorros aún no tienen el desarrollo neurológico para controlar sus necesidades. Aún no pueden controlar su vejiga para retener la orina.

Si tu cachorro viene de una organización o criadero que implementa programas de socialización temprana para cachorros que desarrollan la cognición y las experiencias sociales desde las cuatro a las ocho semanas de edad, es posible que sea más fácil de adiestrar. Por eso es muy importante que, al momento de recoger a tu nueva mascota, preguntes sobre estos programas de aprendizaje temprano.

El primer paso es encontrar un lugar específico al que puedas llevar a tu cachorro de manera constante para que haga sus necesidades. Alrededor de las 8.5 semanas de edad, su cerebro ya se desarrolló lo suficiente para comenzar a relacionar el olor y el área en la que tiene que hacer sus necesidades. A las 8.5 semanas, la mayoría de los cachorros pueden comenzar a hacer estas conexiones mentales importantes y controlar mejor el impulso de hacer sus necesidades.

Adiestrar a tu cachorro es un proceso de dos etapas. Primero, debe aprender a hacer sus necesidades en el lugar designado, y luego controlar el impulso hasta que llegue a ese lugar.

Si es un cachorro joven, debes llevarlo a su lugar para ir al baño cada hora, y siempre después de comer, jugar y dormir. También es importante que observes su comportamiento y aprendas a descifrar sus señales de "tengo que ir al baño". Mientras más edad tenga el perro, más veces tendrá que ir al baño. Pero, no debes dejar pasar más 8 o 10 horas, en especial si es un cachorro.

4 reglas básicas para adiestrar a tu perro

En mi experiencia, hay cuatro reglas básicas para adiestrar a cualquier perro en casa.

  1. Jamás dejes solo a un perro sin adiestrar, esto significa no perderlo de vista ni un segundo. Debes ponerle atención en todo momento, y el simple hecho de estar en la misma habitación no es suficiente. Evita cualquier cosa que pueda hacerlo fracasar. Cuando no puedas interactuar con tu perro, lo mejor es meterlo a su jaula.

    Algunos dueños de mascotas creen que las jaulas son malas, pero no es así, todo lo contrario. Una jaula es un hábitat normal y muy natural para un perro, siempre y cuando no la relacione con un castigo. Jamás utilices una jaula para castigar a tu perro. Por naturaleza, los perros siempre buscan un refugio.

     En circunstancias normales, disfrutan y buscan espacios pequeños, seguros y cálidos para descansar. Si le das a tu cachorro su propia guarida en forma de jaula, y no la relaciona con algo negativo, aprenderá a amarla.

    Siempre dejo abierta la puerta de las jaulas de mis perros y les encanta entrar a tomar su siesta, que es justo lo que quiero que hagan. Las jaulas son muy útiles y de hecho, son fundamentales para adiestrar a tu perro.

    En la naturaleza, cuando los cachorros están en área pequeña y cerrada aprenden a controlar mejor su impulso por hacer sus necesidades. Por ejemplo, las madres lobas enseñan a sus camadas a hacer sus necesidades afuera de su guarida. Si le das a tu cachorro su propia guarida, no querrá ensuciarla.

    Las jaulas también sirven para mantener a tu mascota a salvo de una larga lista de peligros y desastres potenciales, desde cables eléctricos hasta el plato de comida del gato y las visitas inesperadas.

    Si te rehúsas a utilizar una jaula para adiestrar a tu mascota, entonces lo único que puedes hacer es mantenerte siempre a su lado, vayas a donde vayas, jamás debes perderla de vista.

    Para hacerlo, ponle una correa corta (de no más de 4 pies de largo) a tu perro y engánchala a tu ropa o cinturón. Es obvio que no se trata de la opción más práctica, por eso recomiendo tanto las jaulas.
  2. Establece horarios para alimentarlo. Si aún no has adiestrado a tu perro y permites que tenga acceso libre a su plato de comida, comerá todo el día y hará sus necesidades a todas horas. Será casi imposible saber cuál es el mejor momento para sacarlo a hacer sus necesidades. Bajo ninguna circunstancia recomiendo que tu mascota tenga su tazón lleno de comida todo el tiempo, esta es una mala idea en especial con un perro sin adiestrar.

    Si estableces un horario y lo alimentas una o dos veces al día, sabes que después de 30 minutos a una hora tendrás que sacarlo a hacer sus necesidades. Es importante que siempre haya alguien en casa que pueda sacar al perro.

    Alimentar a tu perro de esta forma hace que las pausas para ir al baño sean mucho más predecibles y te permite tener más control sobre la situación. Mientras más oportunidades le des a tu cachorro para hacer sus necesidades afuera, será más fácil adiestrarlo.
  3. Recompensa a tu perro por su buen comportamiento. Para adiestrar a tu perro, es fundamental que lo recompenses por su buen comportamiento y lo elogies de una manera que pueda entender. Aquí el momento en el que lo haces también es un factor muy importante. Tu perro captará las señales del tono de tu voz. Si dices cosas como "buena chica", "bien hecho", "buen trabajo" en un tono tranquilo y cariñoso, después de que cumpla un objetivo, reforzarás ese comportamiento. 

    Casi todos los perros hablan el idioma de la comida, por lo que los premios ayudarán mucho en este proceso. Cuando tu perro haga sus necesidades en el lugar correcto, felicítalo y dale un premio de 1 a 3 segundos después de dicho comportamiento. Recuerda que la constancia es fundamental, así que siempre ten premios a la mano para recompensarlo tan pronto como haga las cosas bien.

    Al poco tiempo, notará que te hace feliz cada vez que hace sus necesidades al aire libre y, además, recibirá una recompensa. Refuerza ese buen comportamiento en cuanto suceda, y al principio, no hay mejor recompensa que los premios de comida.

    Este tipo de premios solo son necesarios por un corto tiempo antes de que los perros respondan solo a los elogios. Una vez que esté bien adiestrado, puedes dejar de utilizar los premios si así lo deseas y, solo hacer elogios verbales.
  4. Jamás castigues a tu perro cuando se equivoca. Sin gritos, sin contacto físico y nunca obligues a tu perro a entrar en contacto con sus heces u orina. Para muchas personas, esta puede ser la regla más difícil de seguir, pero es una de las más importantes.

    Ya sé que es frustrante cuando tu mascota no hace lo que quieres. Pero, si deseas tener éxito, no castigues a tu perro si comete un error. Y prepárate porque sucederá con frecuencia. Por ejemplo, a veces, los cachorros salen a orinar a primera hora de la mañana, pero debido a que sus vejigas aún se están desarrollando, no sienten que les queda un poco de orina y 10 minutos después de salir a hacer necesidades, sienten el impulso de vaciar su vejiga por completo, pero lo hacen dentro de la casa.

    Si te ha pasado, debes ser más inteligente que tu cachorro. Sácalo en la mañana y luego, cinco minutos después para que pueda vaciar por completo su vejiga.

    Es muy importante que tengas una buena actitud en este tipo de situaciones. Primero que nada, no le des la oportunidad de fallar. Pero, si eso sucede, debes saber que tu reacción tendrá un efecto a largo plazo. Si respondes de forma negativa, tu cachorro te tendrá miedo,

    lo que podría provocar que trate de hacer sus necesidades a escondidas, en lugar de aprender a confiar en ti y decirte que necesita salir.

    Tu perro sabrá que estás molesto con él, pero no sabrá por qué. Se sentirá confundido y asustado.  Para tu perro, eres el centro del universo, es muy importante que seas un modelo a seguir y que le des la confianza para que siempre pueda recurrir a ti.

    Incluso si lo atrapas "en el acto" dentro de casa, no te exaltes, ya que podría relacionar su impulso por hacer sus necesidades con enojo de tu parte, y tratará de hacerlo sin que lo veas.

    Cuando se trata de adiestrar a tu mascota, debes hacer que todas las situaciones sean positivas. En resumen, castigar o asustar a tu perro no ayudará a que se comporte de manera apropiada.

    Solo recuerda que cuando ya está de cuclillas, significa que ya es demasiado tarde. El aspecto más importante al momento de adiestrar a tu mascota, es asegurarse de hacer bien tu parte para ayudarla a tener éxito.

La importancia de las señales verbales

Cuando sea hora de que tu perro vaya al baño por la mañana, toma algunos premios, ponle la correa y siempre llévalo al mismo lugar. Dale su espacio, unos 5 minutos para hacer sus necesidades. Casi siempre, ese tiempo es suficiente para que husmee y elija el lugar. Si la sacas y comienza a hacer todo bien pero no hace sus necesidades, es una señal de que no lo hará en ese momento.

En este caso, regrésalo a su jaula (u otro espacio confinado) y cierra la puerta para que no ande suelto por la casa porque podría ocurrir un accidente. Además, eso incrementa sus probabilidades de fracasar en su adiestramiento y nadie quiere eso.

Mejor, en 10 o 15 minutos, con sus premios en mano, vuelve a sacarlo e inténtenlo de nuevo. Aunque lo más probable es que no tengas que repetir esto más de una vez antes de que haga sus necesidades, en ocasiones, si necesitarás hacerlo un par de veces.

No cometas el error de asumir que, si no hizo sus necesidades la primera vez, significa que no tiene ganas. Claro que tiene ganas, sobre todo a primera hora de la mañana. Entonces, si no está en su jaula, tiene que estar afuera hasta que haga sus necesidades.

Cuando lo haga, refuerza su comportamiento con una señal verbal. Por ejemplo, cuando tu perro comience a orinar, di "ir al baño" con la voz tranquila. Esto refuerza el comportamiento deseado. Creas una relación en su mente con las palabras de "ir al baño" y el acto de hacer sus necesidades. "Haz popo" o alguna otra frase corta es otra buena señal en el caso de defecar.

Tarde o temprano, podrás llevarlo a cualquier lugar, ya sea en casa o en otro parte, y darle la señal verbal que elegiste y hará sus necesidades. En cuanto tu perro acabe de hacer sus necesidades, dale un premio y dile "buen trabajo".

Dale un par de premios más y sigue elogiándolo antes de regresar a la casa. No esperes hasta entrar a la casa para darle un premio, ya que eso lo confundirá y relacionará el hecho de regresar a la casa con los premios, en lugar de relacionarlo con hacer sus necesidades afuera.

Por eso que es muy importante llevar premios cuando lo sacas y recompensarlo justo después de que hace sus necesidades.

Consejos para las personas que tienen un patio con cerca

Si tienes un patio con cerca y seguro, puedes dejar que tu perro salga solo para hacer sus necesidades. Pero, no te recomiendo que lo hagas desde el inicio.

Número uno, es importante que siempre verifiques las heces de tu mascota en busca de signos de diarrea o si comió algo que no debería como cortezas de árboles, piedras o palos.  A los cachorros les encanta meterse todo al hocico. Es imposible establecer una señal verbal de "ir al baño" si lo dejas solo. Tampoco podrás darle un premio justo después de que haga sus necesidades.

Ciertos perros y razas parecen entender desde una edad muy temprana que no deben hacer sus necesidades adentro de la casa. Mientras que otros perros pueden tardar un poco más. Pero, sin importar la raza y el tipo de perro, todos pueden aprender a hacer sus necesidades en el lugar correcto. Algunos perros solo necesitan un poco más de tiempo y, en ocasiones, ciertos cachorros con un desarrollo cognitivo más lento tardarán un poco más en comprender las reglas básicas del adiestramiento.