HISTORIA EN BREVE

  • Un estudio de 2016 quiso saber si los perros prefieren las golosinas o los elogios
  • Investigadores de la Universidad de Emory usaron escáneres fMRI para observar la actividad neuronal de 15 perros, mientras sus dueños les daban golosinas y elogios
  • 13 de los 15 perros mostraron la misma o mayor actividad cerebral cuando recibieron elogios, solo dos perros mostraron preferencia por la comida
  • Un estudio previo demostró que los perros prefieren caricias a elogios

Por la Dra. Karen Shaw Becker

Muchos perros adoran tanto la comida, que sus dueños están seguros que prefieren un sabroso manjar. Y esto no es raro, ya que a la mayoría de los perros les motiva más la comida que cualquier otra cosa. Esta es la razón por la que existen las golosinas para entrenamiento. Y también por esto, los entrenadores de perros recomiendan usar golosinas durante su entrenamiento.

Si alguna vez te has preguntado si tu perro realmente te ama o si solo te quiere por la comida que le das,  no eres el único. Sin embargo, no te preocupes. Un pequeño estudio evaluó si los perros prefieren las recompensas de comida o los elogios de su dueño.

Algunos perros valoran los elogios tanto como las golosinas

Para realizar el estudio, los investigadores de la Universidad de Emory usaron escáneres fMRI para observar la actividad neuronal de 15 perros, mientras sus dueños les daban golosinas y elogios.

Primero se entrenó a los perros para que relacionaran tres objetos con tres resultados diferentes. Un camión de juguete rosa significa un premio, un caballero de juguete azul significa elogios por parte del dueño y un cepillo para el cabello significaba que no hay premio. Los perros completaron 32 pruebas para cada objeto, mientras la máquina fMRI registró su actividad cerebral.

Los 15 perros reaccionaron más al camión y al caballero de juguete que al cepillo. Además:

  • 9 de los 15 perros mostraron una actividad neuronal similar ante el camión y el caballero de juguete, lo que indica que prefieren las golosinas igual que los elogios
  • Cuatro perros mostraron una mayor reacción ante el caballero de juguete, lo que sugiere que los elogios los motivan más
  • Los 2 perros restantes mostraron una mayor reacción ante el camión de juguete, lo que indica que prefieren las golosinas

Resultado: para la mayoría de los perros (13 de los 15), las áreas del cerebro responsables de la toma de decisiones mostraron la misma o mayor actividad cuando los elogiaron que cuando recibieron un premio.

La mayoría de los perros buscan la interacción humana

En la segunda fase del estudio, se puso a los perros en un laberinto sencillo, construido con puertas para bebés. Al final de un camino del laberinto había un tazón de comida y en otro camino estaba su dueño sentado de espaldas. La mayoría de los perros tomaron el camino que los llevaba a sus dueños y al llegar recibieron elogios.

Los perros que se eligieron el camino del tazón de comida son los mismos que prefirieron las golosinas en lugar de los elogios durante la exploración por resonancia magnética funcional. Gregory Berns, neurocientífico de Emory y autor principal del estudio, lo explicó de esta manera:

"Queremos entender el vínculo perro-humano, y si se trata de una relación real entre ambos o solo por la comida. Encontramos que 13 perros prefirieron o les gustaba de igual manera los elogios de sus dueños a la comida.
Solo dos de los perros mostraron una fuerte preferencia por la comida".

Uno de ellos es una cruza de terrier de pelo corto llamado Ozzie que eligió la comida por encima de los elogios de su dueño todas las veces. (¡Su dueño sabe que, aunque Ozzie prefiere la comida, lo sigue amando!)

La creencia popular es que los perros son "máquinas pavlovianas", dice Berns. Lo que significa que, su única motivación es la comida, y los humanos son un medio para obtenerla. Sin embargo, una nueva visión es que los perros también buscan el contacto humano porque lo disfrutan.

"Los perros son individuos y sus perfiles neurológicos se ajustan de acuerdo a las elecciones de comportamiento que hacen", dice Berns. "La mayoría de los perros alternaron entre la comida y el dueño, pero los perros con la mayor respuesta neuronal a los elogios eligieron ir a sus dueños el 80 a 90 % de las veces".
Esto demuestra la importancia de los elogios hacia los perros. Podría ser similar a lo que las personas sentimos cuando alguien nos elogia".

Kadi, una cruza de labrador y golden retriever, fue consistente en su preferencia por los elogios, a diferencia de Ozzie. Esto tiene sentido, ya que estas razas son motivadas por el deseo de complacer a sus humanos.

Es por eso que estas razas son usadas en trabajo de terapia, mientras que los perros que no se motivan con los elogios podrían ser mejores para el trabajo que requiere más independencia, como búsqueda y rescate.

Un estudio previo midió el valor de las caricias versus elogios

Si te sorprende que la mayoría de los perros del estudio de Emory valoraron los elogios y las golosinas casi de la misma manera, un estudio previo demuestra que a tu compañero peludo le encanta que lo acaricien.

Investigadores de la Universidad de Florida y la Universidad de Arizona quisieron determinar si los perros prefieren las caricias a los elogios, y si les da lo mismo que se los brinde su dueño o un extraño.

Los investigadores trabajaron con tres grupos de perros: perros de refugio, perros de familia con extraños y perros de familia con sus dueños. A cada perro lo llevaron con una correa a una habitación donde había dos asistentes.

Para los dos primeros grupos de perros, ambos asistentes eran extraños, y para el tercer grupo, un asistente era un extraño y el otro era el dueño del perro. Uno de los dos asistentes saludó al perro con elogios mientras que el otro asistente lo saludo con caricias.

Luego se puso al perro en medio de ambos asistentes, se le quitó la correa y se observó la interacción voluntaria del perro con cada asistente en sesiones de 10 minutos.

Durante cada sesión, de cinco minutos, los asistentes le daban solo elogios o solo caricias. Luego los asistentes intercambiaron roles durante otros cinco minutos. Los perros se evaluaron según la cercanía física y la cantidad de tiempo que pasaron con cada asistente.

Las caricias fueron el ganador indiscutible

Los resultados del experimento demostraron que todos los perros prefieren las caricias a los elogios. Los perros pasaron más tiempo con la persona que los acariciaba, sin importar que no era su dueño.

Y cuando los asistentes cambiaron de lugar, los perros continuaron conviviendo con la persona que lo acariciaba. Una de las razones por la que a los perros les gusta tanto las caricias podría ser porque les reduce la frecuencia cardíaca y la presión arterial.

Entonces, sin importar que sean perros de refugio o de familia, si están con sus dueños o con extraños, siempre eligen las caricias antes que los elogios. Nunca les es suficiente. Y aunque el elogio causó un interés en los perros, nunca superó a las caricias.

Según los investigadores, estos resultados confirman que las caricias proporcionan un refuerzo positivo para el comportamiento canino. Acariciar a tu perro podría ser un estímulo de refuerzo natural, mientras que los elogios por sí solos no son efectivos, así que tendrían que combinarse con las caricias y los premios.