HISTORIA EN BREVE

  • Siempre recomiendo remedios naturales que no sean tóxicos, como primera opción en los protocolos de tratamiento y bienestar de mis pacientes
  • Algunos de los remedios naturales que pueden beneficiar a tu perro o gato incluyen aceite de coco, miel de manuka, aloe vera, aceite de lavanda, aceite de orégano, jengibre y manzanilla
  • Siempre es una buena idea consultar a un veterinario integral u holístico sobre las necesidades individuales de tu mascota, así como los remedios naturales y las dosis más adecuadas para ella

Por la Dra. Karen Shaw Becker

Si eres un lector regular de mi sitio web, sabes que siempre que es posible utilizo remedios y terapias de curación naturales para ayudar a mis pacientes a superar enfermedades y mantener una salud óptima. Si se utilizan de forma correcta, las plantas, las hierbas, los aceites esenciales y otras sustancias naturales no tóxicas pueden complementar y, a menudo, reemplazar los medicamentos y otros agentes químicos.

Si deseas usar este enfoque con tu mascota, mi recomendación es que consultes a tu veterinario integral u holístico sobre la salud y el estilo de vida de tu compañero animal antes de comenzar cualquier tratamiento nuevo.

7 remedios naturales que pueden beneficiar a tu mascota

1. Aceite de coco. En verdad creo en los beneficios del aceite de coco para las mascotas. El aceite de coco es fuente de triglicéridos de cadena media (MCT), los cuales benefician la función cognitiva.

Mi recomendación es que las mascotas consuman ¼ de cucharadita de aceite de coco 100 % orgánico, prensado en frío y de grado humano por cada 10 libras de peso corporal, dos veces al día. Para ello, se puede agregar a sus comidas, ya sean alimentos caseros y frescos o crudos y comerciales.

Además, este aceite es fuente de ácido láurico, que es un poderoso agente antimicrobiano. Esto lo convierte en una opción ideal para mascotas con infecciones por hongos o alergias. De igual forma, puede ser de gran ayuda para controlar las bolas de pelo en gatos

También se puede aplicar por vía tópica para tratar afecciones de la piel. Puede ayudar a mejorar el estado general de la piel de tu mascota y sanar las zonas irritadas que provocan comezón. Es útil para tratar cortadas, abrasiones, picaduras, mordeduras y puntos calientes, tanto para aliviar las molestias que producen como para sanarlos por completo.

2. Miel de manuka. La miel de manuka es uno de mis remedios favoritos, es 100 % natural y muy efectivo. Los ensayos clínicos han demostrado que la miel de manuka puede erradicar cientos de cepas de bacterias, incluyendo algunas variedades resistentes a los antibióticos.

Tiene un ingrediente exclusivo que posee cualidades antimicrobianas, el cual se conoce como Unique Manuka Factor (UMF) y tiene una extraordinaria actividad antibacteriana.

La miel libera peróxido de hidrógeno a través de un proceso enzimático que le otorga sus cualidades antisépticas, pero la miel de manuka activa contiene una "característica especial" que la hace muy superior a otros tipos de miel cuando se trata de eliminar bacterias.

El nivel de UMF varía, por lo que cada lote de manuka se clasifica y se valora según la cantidad del UMF que contiene. Cuanto mayor sea la concentración de UMF, más oscura, más gruesa y más costosa será la miel. Se recomienda una calificación de UMF de 10 o más para uso medicinal.

Empleo mucho la miel de manuka en mis pacientes para tratar las infecciones resistentes en el oído y la piel (como los puntos calientes, el acné felino y la dermatitis por lamido acral), así como las heridas grandes y superficiales que no pueden cerrarse mediante un procedimiento quirúrgico. Es muy beneficiosa para tratar infecciones secundarias en víctimas de quemaduras.

También, cuando se administra por vía oral, es eficaz para enfrentar la bacteria H. pylori, que ejerce un rol en la irritación gastrointestinal (GI) y puede ser muy útil en casos de crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado (SIBO, por sus siglas en inglés), al igual que el exceso de E. coli en animales con disbiosis.

3. Aloe vera o sábila. Puedes utilizar el gel interior de la planta de aloe vera para reducir las molestias de irritaciones, cortadas o heridas en la piel de tu mascota. Después de limpiar el área en cuestión, aplica aloe puro para brindar un efecto calmante.

Si tu mascota padece de estreñimiento, puedes agregar a sus comidas un poco de jugo de hoja entera de aloe vera, el cual es un laxante natural. El jugo de aloe de la hoja interna, que no contiene la piel, ayuda a curar las úlceras gástricas, la colitis y el síndrome del intestino permeable.

La dermatitis acral por lamido, también conocida como granuloma por lamido, es una lesión en la piel que se produce por lamerse de forma constante. Si tu mascota la desarrolla, considera aplicarle una cataplasma de sábila después de limpiar el área afectada. Rebana una penca de sábila y colócala sobre la herida. Reemplázala cada 4 horas.

4. Aceite de lavanda. El aceite de lavanda se utiliza en la aromaterapia para ayudar a calmar a los animales que experimentan nerviosismo o ansiedad. Yo lo he empleado en la rehabilitación de vida silvestre. Basta con poner unas gotas de aceite de lavanda puro y de grado farmacéutico en una bola de algodón y pegarla con cinta adhesiva en el exterior de la jaula. Tiene excelentes resultados.

Si tu perro tiene fobia al ruido, mi recomendación es colocar unas gotas de este aceite en su collar o ropa de cama antes de que ocurra algo que le pueda generar estrés, si es posible, o difundirlo alrededor de la casa para un efecto calmante general.

Si estás en busca de un repelente de pulgas natural, puedes mezclar unas gotas de este aceite con vinagre de sidra de manzana y agua (a partes iguales), y rociarlo sobre tu mascota antes de que salga. Esa mezcla también ayuda a reducir el lamido en las patas, si la aplicas en esa zona.

Si tu gatito tiene dermatitis felina, debes limpiar la herida con povidona yodada diluida y después aplicar unas gotas de aceite de lavanda diluido en aceite de coco para favorecer la curación. Asimismo, el aceite de lavanda puede ser beneficioso para tratar los puntos calientes. Agrega unas gotas a la miel de manuka o al aceite de coco y aplica en la herida después de desinfectarla dos veces al día.

5. Aceite de orégano. El aceite esencial de orégano tiene propiedades antibacterianas y antiparasitarias muy potentes. Se puede usar de muchas formas diferentes, incluso para calmar la comezón en la piel y la irritación de las encías, así como equilibrar el microbioma intestinal de los perros.

Es importante diluirlo antes de usarlo en una mascota. Si tu amigo peludo tiene ácaros del oído, puedes aplicarle aceite de orégano diluido (1 gota mezclada con 10 gotas de aceite base, como caléndula o aceite de coco); no olvides que, antes de eso, debes limpiar muy bien sus oídos.

En caso de que tu perro tenga una infección por hongos, recomiendo agregar algunos alimentos antifúngicos naturales a su dieta, por ejemplo, pequeñas cantidades de orégano fresco para ayudar a reducir la infección de forma natural. También es una hierba beneficiosa para perros que padecen de tos de las perreras o infecciones recurrentes.

Suelo agregar unas cuantas gotas de aceite de orégano al champú para mascotas con el fin de reducir el crecimiento bacteriano en pacientes con infecciones por SARM (Staphylococcus aureus resistente a la meticilina).

6. Jengibre. El jengibre es un remedio que se usa mucho, no es tóxico ni irritante y ayuda a aliviar problemas estomacales. Puedes administrarlo por vía oral o usarlo en forma de aceite: aplica unas gotas en la palma de la mano, mézclalo con un aceite portador (como el aceite de coco o de oliva) y masajea el vientre de tu mascota.

Otra alternativa es agregar pequeñas cantidades de jengibre recién rallado o la hierba seca a una albóndiga u otro bocadillo. No uses más de una pizca (1/16 de cucharadita) para gatitos, 1/8 de cucharadita para perros pequeños de menos de 10 libras, 1/4 de cucharadita para perros medianos, 1/2 cucharadita para perros grandes y 3/4 a 1 cucharadita para razas gigantes.

El jengibre debe administrarse de una a tres veces al día según sea necesario y una hora antes de viajar si deseas aliviar la cinetosis. Como alternativa, agrega ¼ de taza de té de jengibre (por cada 20 libras de peso corporal) a la comida diaria de tu perro según sea necesario, de esta manera podrás controlar las náuseas y el malestar gastrointestinal.

7. Manzanilla. La manzanilla es un increíble agente calmante. Además, tiene propiedades analgésicas y antiespasmódicas, y es beneficiosa para relajar el sistema nervioso central.

Se puede usar para darle una sensación de calma a las mascotas que sienten ansiedad cuando van a una consulta con el veterinario. También puedes colocar una bolsa de té de manzanilla fría sobre una herida, área irritada o picadura de insecto en la piel de tu mascota, esto tendrá un efecto calmante.

Asimismo, debes considerar recurrir a un enjuague calmante de manzanilla después de bañar a tu amigo peludo. Agrega 5 bolsitas de té de manzanilla a 2 litros de agua muy caliente y deja reposar hasta que el agua se enfríe. De hecho, mi recomendación es dejarlas en el agua por un aproximado de 3 horas para que se libere la mayor cantidad de polifenoles.

Retira las bolsitas y vierte el enjuague desde el cuello de tu mascota cuando termines de bañarla. Masajea su piel mientras viertes el té y no enjuagues. Incluso puedes "reciclar" las bolsitas de té y usarlas como una cataplasma calmante para tratar los puntos calientes o las erupciones, solo debes meterlas al congelador para crear una "bolsa de hielo medicinal" lista para usar.