HISTORIA EN BREVE

  • La mayoría de los terapeutas de rehabilitación animal concuerdan en que el ejercicio terapéutico debe ser la base de cada programa de rehabilitación personalizado
  • Hay muchos factores que debes considerar al momento de diseñar un programa de rehabilitación para un paciente veterinario, incluyendo la edad, lesiones, diagnóstico y limitaciones del animal, así como la capacidad del dueño de la mascota para realizar los ejercicios en casa
  • Un protocolo completo para la mayoría de los pacientes de rehabilitación animal debe enfocarse en el equilibrio y propiocepción, fortalecimiento del abdomen o zona core, resistencia y flexibilidad
  • Los centros de terapia de rehabilitación proporcionan muchos tratamientos beneficiosos además del ejercicio activo y terapéutico
  • La terapia de rehabilitación debe ser el estándar del plan de cuidados generales para mascotas lesionadas, discapacitadas o débiles

Por la Dra. Karen Shaw Becker

De acuerdo con la veterinaria, la Dra. Janice Huntingford, "los ejercicios terapéuticos son la base de la rehabilitación" para las mascotas. La Dra. Huntingford, quien es una terapeuta certificada en rehabilitación canina, considera que "no se trata de utilizar algún láser ni caminadoras para correr bajo el agua", sino que el ejercicio debe ser parte esencial de cada protocolo de rehabilitación para pacientes veterinarios.

Al igual que la mayoría de los especialistas en rehabilitación veterinaria que conozco, coincido con la perspectiva de la Dra. Huntingford sobre el ejercicio, y estoy de acuerdo en que es muy importante para mejorar el rango de movimiento, fuerza muscular, flexibilidad, equilibrio, marcha y propiocepción (también conocido como kinanestesia, o sensación de moverse por sí solo y posición del cuerpo) de un animal. El ejercicio también es muy beneficioso para disminuir el dolor, mejorar la sanación, promover la pérdida de peso, así como mejorar la resistencia y rendimiento.

Los programas de ejercicio más efectivos para pacientes de rehabilitación incluyen seguir las indicaciones y tomar en consideración no solo la edad, lesiones, diagnóstico y limitaciones del animal, sino también la capacidad del dueño de la mascota para realizar la parte del protocolo en casa.

¿Cómo se crean los programas de ejercicio personalizados para pacientes de rehabilitación?

Cada paciente es diferente, por lo que cada programa de ejercicio se debe diseñar de forma personalizada. La Dra. Huntingford enlista nueve puntos importantes para diseñar un protocolo de ejercicios para pacientes de rehabilitación veterinaria:

  1. Cualquier patología subyacente podría afectar la capacidad del paciente para hacer ejercicio
  2. Estado psicológico y disposición del paciente para realizar ejercicios
  3. Experiencia del paciente
  4. Establecer objetivos a corto y largo plazo
  5. Evaluar al paciente en cada visita
  6. Asegurar la mecánica corporal adecuada, para el terapeuta y el paciente
  7. Utilizar dispositivos de asistencia, en caso de ser necesario
  8. Estar atento a las señales de fatiga
  9. Terminar con un aspecto positivo

Cualquier persona que intente diseñar un programa de ejercicios para una mascota que reciba terapia de rehabilitación debe tener al menos una comprensión básica de la fisiología del ejercicio, tal como la diferencia entre las fibras musculares de contracción lenta (tipo 1) y rápida (tipo 2), y cómo la lesión o inmovilización de los músculos podría impactar en el paciente.

Es por eso que siempre recomiendo colaborar con un terapeuta certificado en rehabilitación animal. Además, es importante conocer los tres tipos de ejercicios que trabajan los músculos de diferentes maneras:

1. Ejercicios concéntricos. Consisten en contracciones que acortan el músculo y son la parte del movimiento durante en el cual el músculo objetivo trabaja para realizar la acción; por ejemplo, el movimiento de levantamiento con curl de bíceps.

2. Ejercicios excéntricos. Son contracciones que alargan el músculo, como el movimiento que se utiliza para extender o bajar el brazo cuando se realiza una flexión de bíceps.

3. Ejercicios isométricos. Son contracciones de un músculo o grupo de músculos en particular. Estos ejercicios no cambian la longitud del músculo ni mueven la articulación relacionada. Los ejercicios isométricos ayudan a mantener la fuerza. Un ejemplo de ejercicio humano es la postura de plancha.

De acuerdo con la Dra. Huntington, para la mayoría de los pacientes de terapia de rehabilitación animal, el enfoque de un programa de ejercicios debe centrarse en cuatro componentes principales: equilibrio y propiocepción, fortalecimiento del abdomen (zona core), resistencia y flexibilidad. Aparte de eso, un terapeuta de rehabilitación podría incluir movimientos para enfocarse en el área específica de la lesión o discapacidad, o en el caso de los atletas caninos o perros de trabajo, ejercicios para mejorar su fuerza y velocidad.

Tratamientos adicionales que pueden proporcionar los centros de terapia de rehabilitación

Además de ejercicio terapéutico, existen otros tratamientos beneficiosos que pueden ofrecer los centros de terapia de rehabilitación animal. Estos son algunos ejemplos:

Masajes

Acupuntura

Quiropráctica

Movimientos de las articulaciones

Estiramientos

Terapia con láser frío (terapia con láser de bajo nivel)

Magnetoterapia con pulsos

Ultrasonido terapéutico

Terapia de calor

Terapia de compresión

Estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (TENS, por sus siglas en inglés)

Terapia eléctrica neuromuscular

Hidroterapia: mi terapia de rehabilitación favorita

La hidroterapia, también llamada terapia acuática, es una de mis terapias de rehabilitación favoritas para mascotas, porque moverse en el agua puede otorgar innumerables beneficios. Puede ayudar a sanar los animales lesionados, aliviar el dolor y también puede proporcionar beneficios emocionales.

Por lo general, la hidroterapia involucra una caminadora o nadar bajo el agua. Las caminadoras acuáticas son una excelente manera de aprovechar las actividades funcionales y naturales de tu mascota, como caminar, trotar y correr. La caminadora aprovecha sus patrones naturales al caminar, lo que ayuda a mejorar su rango de movimiento luego de una lesión o cirugía.

Al mismo tiempo, las immersiones acuáticas pueden generar una ligera resistencia, lo que ayuda a desarrollar y mantener la fuerza muscular. La flotabilidad del agua elimina la presión de las articulaciones lesionadas o adoloridas.

La terapia acuática también puede mejorar la salud cardiovascular, fuerza muscular y el rango de movimiento de tu mascota. Durante la inmersión acuática, casi todos los sistemas de órganos de tu mascota se relajan y estimulan al mismo tiempo. Puede aliviar el dolor y espasmos musculares, disminuir el estrés y estimular las funciones metabólicas y hormonales.

Esta terapia también puede beneficiar al sistema linfático, disminuir la inflamación y apoyar el proceso digestivo del cuerpo. Si tu mascota está envejeciendo, es probable que se haya vuelto un poco más lenta y quizás pierda algo de movilidad. La hidroterapia no solo puede ayudar a aliviar el dolor articular en tu mascota de edad avanzada, también puede ayudarle a recuperar la confianza.

El movimiento dentro del agua puede ser un gran ejercicio para las mascotas mayores que presentan dificultades para caminar, correr o realizar ejercicios terapéuticos. Hacer sesiones regulares de natación también puede ayudar a quemar calorías y adelgazar a una mascota con exceso de peso sin generar más desgaste en las articulaciones envejecidas. De igual manera, las mascotas con artritis, mielopatía degenerativa, debilidad en las extremidades posteriores o displasia de cadera pueden ser excelentes candidatos para hacer una terapia acuática.

Por lo general, los especialistas en rehabilitación trabajan junto con los veterinarios para personalizar programas que se ajusten a las necesidades terapéuticas específicas de cada mascota. Un curso de rehabilitación puede ser de tan solo dos visitas o hasta tres visitas a la semana, durante tres meses o más. Algunas personas incluso optan por llevar a sus mascotas a sesiones regulares de hidroterapia para ayudarlas a mantener su movilidad y conservar su tono muscular.

Las sesiones formales de terapia de rehabilitación suelen ser de una hora de duración, y su progreso se registra de manera cuidadosa en cada visita. Los protocolos de terapia también suelen incluir planes de cuidados en el hogar diseñados de forma personalizada, los cuales brindan una guía valiosa y específica para los dueños de mascotas que desean ayudar a su compañero animal a recuperar la movilidad y una buena calidad de vida.

De igual manera, existen dispositivos de movilidad como cabestrillos, arneses y ruedas que pueden ser muy efectivas, tanto para las mascotas como para sus humanos. Desde mi punto de vista, la terapia de rehabilitación debería ser el estándar del plan de cuidados generales para mascotas lesionadas, discapacitadas o débiles.

Mascotas que deben tomar terapia de rehabilitación

Si tu mascota se recupera de una lesión, tiene dificultades para moverse o dolor, un especialista en rehabilitación podrá ayudarlo. La Asociación Americana de Rehabilitación Veterinaria (AARV, por sus siglas en inglés) proporciona una lista de padecimientos que pueden tratarse con éxito por medio de la rehabilitación, así como los tipos de mejoras que las mascotas pueden experimentar:

Osteoartritis. Mayor movilidad y rango de movimiento, así como menor inflamación.

Displasia de cadera. Desarrollo de masa muscular de apoyo, así como mayor movilidad y comodidad.

Lesiones musculares. Acelera la curación, restaura la longitud funcional normal y disminuye la inflamación.

Lesiones en la espalda. Previene nuevas lesiones y controla el dolor.

Fracturas. Acelera la recuperación y previene contracturas musculares.

Amputación. Ayuda con la adaptación, desarrolla los músculos de apoyo y controla el dolor.

Enfermedad neuromuscular. Apoya el fortalecimiento, adaptación y control del dolor.

Luxación articular. Fortalece los músculos y ligamentos de apoyo y previene nuevas lesiones.

Lesiones de los tendones. Aumenta el rango de movimiento y la fuerza, disminuye la inflamación y el tejido cicatricial, en especial la reparación posquirúrgica.

Es importante recordar que la terapia de rehabilitación no solo es adecuada para los perros. También podría beneficiar a los gatos, caballos, conejos y otras mascotas.