HISTORIA EN BREVE

  • Hace poco, la compañía de seguros Nationwide Pet Insurance publicó un libro blanco sobre los 1.6 millones de reclamos por cáncer canino que recibieron entre 2015 y 2021; los resultados demuestran que, a diferencia del perro promedio, los perros de raza pura son más propensos a presentar un reclamo por cáncer
  • De las 25 razas más populares, las tres con mayor riesgo relativo de desarrollar cáncer son los boxer, beagle y golden retriever; mientras las tres razas con menor riesgo relativo son bulldog francés, chihuahua y pomeranian
  • Los 10 principales síntomas de cáncer en mascotas también son comunes en muchos otros trastornos y requieren atención veterinaria inmediata
  • Si a tu perro lo diagnostican con cáncer, busca un veterinario integrador con experiencia en el uso de terapias alternativas contra el cáncer, que incluyan una nutrición dirigida; si tu mascota está sana, toma las medidas necesarias para ayudarla a prevenir el cáncer

Por la Dra. Karen Shaw Becker

Hace poco, la compañía de seguros Nationwide Pet Insurance publicó un libro blanco sobre los 1.6 millones de reclamos por cáncer canino que recibieron entre 2015 y 2021. Los resultados demuestran que los perros de raza pura tienen un riesgo relativo 1.9 veces mayor de presentar un reclamo por cáncer que los perros de raza mixta (que incluyen a los perros de raza híbrida). Según Nationwide:

"En general y a diferencia del perro promedio, los perros de raza pura son más propensos a presentar un reclamo por cáncer... y, mientras algunos perros tienen un riesgo relativo aún mayor, otros están muy por debajo del promedio".

Las tres razas con mayor y menor riesgo de desarrollar cáncer

De las 25 razas más populares (ver de la página 4 a 8), las razas que presentaron el mayor número de reclamos fueron: boxer, con un impresionante riesgo relativo del 261 %; beagle (198 %); golden retriever (195 %); rottweiler (que tienen 10 veces más probabilidades de desarrollar cáncer de huesos que el perro promedio); labrador; y, Boston terrier.

Las tres razas de las 25 que presentaron la menor cantidad de reclamos por cáncer fueron: bulldog francés (riesgo relativo de 63 %); chihuahua (52 %); y, pomeranian (45 %).

Este es el riesgo relativo por sistema de órganos para las tres razas de mayor riesgo:

Raza

Tipo de cáncer

Boxer

Corazón, sistema linfático, sistema neurológico, piel

Beagle

Vejiga, sistema endocrino, hígado, mama, bazo

Golden retriever

Huesos, corazón, hígado, sistema linfático, bazo

Entre las 25 razas más populares, los gran danés tenían la edad promedio más joven en el primer reclamo de cáncer con 6.2 años, seguido de los bulldog franceses con 6.8 años y los dóberman con 7.4 años.

En cuanto a los tipos de cáncer, el cáncer de piel ocurrió a la edad promedio más temprana para un primer reclamo de cáncer con 8.11 años, seguido del cáncer linfático (8.57 años), el cáncer de huesos (8.61 años) y el cáncer de mama (8.62 años).

Síntomas de cáncer en perros

La palabra cáncer no solo causa miedo, sino también mucha tristeza y con justa razón. Aunque no me atrevo a etiquetar esta enfermedad en perros como una epidemia, algo sí es seguro: los casos de cáncer en más mascotas jóvenes están alcanzando niveles históricos.

Según la Asociación Americana de Medicina Veterinaria (AVMA, por sus siglas en inglés), alrededor de 1 de cada 4 perros desarrollará cáncer en algún momento de su vida, incluyendo a casi la mitad de los perros mayores de 10 años. Algo muy curioso es que los perros desarrollan cáncer casi al mismo ritmo que los humanos.

Los perros pueden desarrollar cáncer en casi cualquier parte del cuerpo, por lo que los síntomas varían según los tejidos y órganos involucrados, así como por la gravedad de la neoplasia. Si tu mascota presenta una o más de estas 10 señales de advertencia de cáncer, haz de inmediato una cita con tu veterinario:

1. Inflamaciones inusuales que no desaparecen o que crecen. La mejor manera de descubrir bultos, protuberancias o inflamación en tu perro o gato es acariciándolo.

2. Llagas que no sanan. Las llagas que no cicatrizan pueden ser un signo de infección o cáncer, por lo que es necesario que tu veterinario las evalúe.

3. Pérdida de peso. La enfermedad podría ser la razón por la que tu mascota está bajando peso, a pesar de que no está a dieta.

4. Pérdida de apetito. Negarse a comer es otra señal de una posible enfermedad.

5. Sangrado o secreción. El sangrado puede ocurrir por varias razones y la mayoría son señal de que hay un problema. El vómito y diarrea inexplicable también se consideran secreciones anormales.

6. Olor desagradable. Un olor desagradable es una señal común de tumores en el ano, la boca o la nariz.

7. Dificultad para comer o tragar. Esta también es una señal común de cáncer de boca o cuello.

8. Renuencia a hacer ejercicio o poca energía. Esta suele ser una de las primeras señales de que una mascota no se siente bien.

9. Cojera crónica. La cojera tiene muchas causas, que incluyen cáncer de nervio, músculo o hueso.

10. Dificultad para respirar, orinar o defecar. Es necesario que tu veterinario evalúe estos síntomas lo más pronto posible.

Muchos de estos síntomas también son comunes en otros trastornos y enfermedades; sin embargo, lo más importante es que si tu mascota presenta uno o más de estos síntomas, acude de inmediato con tu veterinario. Al igual que con cualquier enfermedad, cuanto antes se diagnostique, mayores serán las posibilidades de un resultado positivo.

Qué hacer si le diagnostican cáncer a tu mascota

Mi amiga y colega, la Dra. Nancy Scanlan, realizó una investigación sobre el cáncer en las mascotas. La Dra. Scanlan compartió dos recomendaciones específicas para reforzar el sistema inmunológico de las mascotas con cáncer:

"La primera son los hongos. Existen muchos productos de hongos. Las investigaciones sobre los hongos en mascotas demuestran que estimulan las células del sistema inmunológico de forma similar a la terapia inmunológica­ en seres humanos. Hacen que las células del sistema inmunológico sean más fuertes, activas y capaces de producir más mensajeros químicos.
La segunda son las hierbas chinas que estimulan el sistema inmunológico. En medicina china se les conoce como Wei Chi. Además, existen hierbas que tienen efectos específicos sobre las células de cáncer: hierbas de la familia del astrágalo o medicina china con astrágalo como parte de la fórmula, junto con fórmulas que incluyen trébol rojo, essiac y hoxsey.
Los veterinarios holísticos están familiarizados con estos productos. De hecho, tratamos de utilizar los que tienen el mayor respaldo científico".

Si a tu perro o gato le diagnostican cáncer, o si prefieres tomar medidas para prevenirlo, mi primera recomendación es buscar un veterinario integrador, ya que la mayoría de los veterinarios convencionales tienen un conocimiento muy limitado sobre el uso de nutrición dirigida, suplementos y otros tratamientos alternativos contra el cáncer.

Si no encuentras un veterinario adecuado cerca de casa, recuerda que hay algunos veterinarios holísticos que también dan consultas por teléfono. Para combatir ciertos tipos de cáncer, es importante buscar un veterinario integrador que se especialice en oncología.

Ningún suplemento en el mundo contrarrestará los efectos de una mala alimentación en el crecimiento de las células de cáncer. Cambiar el tipo de alimentación de tu mascota por una alimentación a base de alimentos crudo, apropiados para su especie, ricos en antioxidantes, grasas saludables, ácidos grasos y muy bajos en carbohidratos es una parte fundamental de un protocolo para tratar el cáncer.

Si hacer dieta cetogénica casera para tu mascota no es una opción viable, te recomiendo que compres un alimento fresco, específico para mascotas con cáncer. A partir de ahí, tu mascota puede beneficiarse de otras terapias complementarias como la oxigenoterapia hiperbárica, la terapia antioxidante por vía intravenosa, los hongos medicinales y otras sustancias naturales, que tu veterinario integrador puede recomendarte.

5 formas de reducir el riesgo de cáncer en mascotas

1. No permitas que tu perro tenga sobrepeso. Los estudios demuestran que restringir la cantidad de calorías que consume un animal previene o retrasa la progresión del desarrollo de tumores entre especies. Menos calorías hace que las células del cuerpo bloqueen el crecimiento de tumores, mientras que demasiadas calorías podrían causar obesidad que, en humanos, se relaciona con un mayor riesgo de cáncer.

Existe una relación muy estrecha entre el exceso de glucosa, mayor sensibilidad a la insulina, inflamación y estrés oxidativo, que son factores en la obesidad y cáncer. Recuerda que la grasa no pasa desapercibida dentro del cuerpo de tu mascota, sino que produce inflamación, lo que puede promover el desarrollo de tumores.

2. Dale a tu mascota un tipo de alimentación antiinflamatoria. Todo lo que produzca o promueva la inflamación en el cuerpo, también incrementa el riesgo de cáncer. Las investigaciones actuales sugieren que el cáncer es una enfermedad inflamatoria crónica, y que el exceso de carbohidratos es una de las causas principales. El proceso inflamatorio crea un entorno en el que proliferan células anormales.

Para crecer y multiplicarse, las células de cáncer necesitan obtener la glucosa de los carbohidratos, por lo que debes eliminar esa fuente que alimenta al cáncer. Los carbohidratos que debes eliminar de la alimentación de tu mascota incluyen los granos procesados, las frutas con fructosa y los vegetales con almidón, como las papas.

Considera que todas las croquetas contienen algún tipo de almidón. Pueden elaborarse sin granos, pero no sin almidón, ya que no es posible fabricar croquetas sin utilizar algún tipo de almidón.

Por lo general, las células de cáncer no pueden utilizar las grasas de la alimentación para obtener energía, por lo que consumir muchas grasas de buena calidad (sin procesar) es beneficioso para los perros con cáncer, al igual que reducir la cantidad de proteínas y dejar de consumir carbohidratos.

Otra de las causas principales de los problemas inflamatorios es una alimentación rica en ácidos grasos omega-6 y baja en omega-3. Los ácidos grasos omega-6 promueven la inflamación, mientras que los omega-3 la combaten. El alimento procesado para mascotas suele contener muchos ácidos grasos omega-6 y muy pocos ácidos grasos omega-3.

Una alimentación saludable; es decir, que sea antiinflamatoria y ayude a combatir el cáncer, consiste en alimentos reales, enteros y de preferencia, sin procesar. Debe incluir proteínas de alta calidad, como la carne de músculo (y de preferencia, vísceras y huesos enteros molidos). Los alimentos para mascotas que casi no están procesados crean menos carcinógenos durante su fabricación, que involucra varios procesos a altas temperaturas.

Los alimentos frescos y saludables para mascotas también deben incluir grandes cantidades de grasa de origen animal sin adulterar, altos niveles de EPA y DHA (ácidos grasos omega-3), algunos vegetales frescos con bajo índice glucémico, junto con los minerales necesarios para satisfacer los requisitos nutricionales mínimos. Esta alimentación apropiada para especies tiene un alto contenido de humedad y no contiene granos ni almidones.

Además, te recomiendo que te asegures que la alimentación sea equilibrada al seguir las recomendaciones de la dieta ancestral, que tienen estándares mucho más rigurosos (mayores cantidades de minerales y vitaminas) que nuestras recomendaciones alimentarias actuales para mascotas (AAFCO).

3. Reduce o elimina la exposición de tus mascotas a las toxinas en el hogar. Esto incluye pesticidas químicos como preventivos contra pulgas y garrapatas, químicos para el césped (herbicidas, herbicidas, etc.), humo de tabaco, retardantes de llama (que se encuentran en camas para mascotas no orgánicas) y limpiadores domésticos (detergentes, jabones, limpiadores, secadoras, desodorantes de habitación).

Dado que vivimos en un mundo muy tóxico y evitar toda exposición química es casi imposible, también te sugiero que implementes un protocolo de desintoxicación regular para tu mascota.

4. Si tu perro es de raza grande o gigante, espera hasta que tenga de 18 meses a 2 años para castrarlo o esterilizarla. Esto se debe a que los estudios relacionan la castración/esterilización con mayores tasas de cáncer canino. Aún mejor, investiga formas alternativas para esterilizar a tu mascota sin alterar su equilibrio hormonal.

5. Evita las vacunas innecesarias. Los protocolos de vacunación deben adaptarse para minimizar el riesgo y maximizar la protección, al considerar la raza, antecedentes, estado nutricional, estilo de vida y la vitalidad general de la mascota. Solicita pruebas de títulos de anticuerpos antes de ponerle otra "vacuna de refuerzo" a tu mascota.