Cómo evitar el glifosato en la alimentación de tu mascota

📝 HISTORIA EN BREVE

Un estudio reciente sobre la exposición de los animales al glifosato (un carcinógeno) en los alimentos para mascotas, demostró que los perros y gatos tienen niveles entre 4 y 12 veces más altos que los de los humanos.
Los datos demuestran que las croquetas sin granos tienen las concentraciones más altas de glifosato, seguidas de las croquetas normales y los alimentos enlatados; los perros que tienen una alimentación cruda no presentaron niveles de glifosato en la orina
Estudios recientes con niños y adultos de Estados Unidos, demostraron un descenso en los niveles de glifosato, debido al consumo de alimentos orgánicos
Los dueños de mascotas pueden participar en un estudio para ayudar a identificar los niveles y fuentes de exposición al glifosato, de sus compañeros animales
Algunas medidas que puedes tomar para proteger a tu familiar peludo son, disminuir la exposición al glifosato a través del medioambiente y de su alimentación, y desintoxicarlo cada que sea necesario

🩺 Por la Dra. Karen Shaw Becker

La mayoría de las investigaciones acerca del glifosato tóxico, que es la sustancia química que se encuentra en los herbicidas como el ‘Roundup’ de Monsanto, se centran en los efectos de la exposición a través del medioambiente, en personas y animales. El glifosato podría tener una relación con una gran variedad de enfermedades en personas y en mascotas, incluyendo cambios en las bacterias intestinales, estrés oxidativo, enfermedad del hígado graso, toxicidad renal, neurotoxicidad, cáncer y más.

En Europa, donde los centros de toxicología realizan un seguimiento de dichos elementos, se han presentado casos de envenenamiento agudo por glifosato en mascotas que, en algunos casos, provocaron la muerte. En la mayoría de los casos, la exposición fue por comer pasto o caminar en un patio que había sido fumigado con algún producto con glifosato.

Glifosato en alimentos comerciales para mascotas

La revista Science of The Total Environment publió un estudio en 2019, en el cual investigadores del estado de Nueva York evaluaron las concentraciones de glifosato y sus derivados en muestras de orina de 30 gatos y 30 perros. Descubrieron que el promedio de concentración en los gatos era 2 veces más alto que en perros. Además, las dosis de exposición fueron de 2 a 4 órdenes de magnitud más bajas, que el consumo diario adecuado para los humanos.

En un estudio de 2018, un equipo de investigadores de la Universidad de Cornell examinó los residuos de glifosato en 18 alimentos comerciales para mascotas de 8 fabricantes. Los resultados del estudio demostraron lo siguiente:

Se encontró glifosato en todos los productos que se analizaron (incluyendo el que no tenía organismos genéticamente modificados (OGM), que tenía niveles más altos que varios de los otros productos)
La concentración de glifosato tenía una correlación con el contenido de fibra sin procesar, lo que significa que podría provenir de un producto vegetal
El consumo diario promedio de glifosato de todos los productos, se calculó en niveles de exposición del 0.68 % al 2.5 % en humanos de Estados Unidos y la Unión Europea
Sin embargo, los productos más contaminados se calcularon en niveles de exposición de 7.3 % y 25 % por encima del consumo diario promedio para humanos
En general, los alimentos comerciales para mascotas tienen una cantidad tan alta de glifosato, que la exposición es 4 a 12 veces mayor que la de los humanos por kilogramo

El Health Research Institute Laboratories (HRI) realizó un estudio sobre los niveles de glifosato en perros y gatos, y los resultados señalaron siguiente:

Los gatos tienen un promedio de 8 ppb, el cual es 16 veces más alto que el promedio en la orina de un humano
Los perros tienen un promedio de 15.8 ppb, que es 32 veces más alto
No se encontraron niveles de glifosato en los perros que consumen alimentos crudos
Los perros que consumen comida enlatada tienen los niveles más bajos
Los perros que comen croquetas secas tienen niveles más altos que aquellos que comen comida para mascota enlatada
Los perros que comen croquetas sin granos, mostraron los niveles más altos, tal vez debido a ingredientes como la avena, proteína de guisantes, garbanzos y lentejas
Los investigadores analizaron cultivos como la avena y legumbres, y encontraron que podrían aumentar los niveles de glifosato en los humanos

Cómo evitar el glifosato en los alimentos para mascotas

Hace poco, se publicaron los resultados de un estudio que analizó el efecto de los alimentos orgánicos en los niveles de glifosato en niños y adultos de los Estados Unidos. A pesar de que el tamaño del estudio era pequeño, mi colega, el Dr. Jean Dodds, destacó su naturalidad, geografía, diversidad y precisión. Los investigadores encontraron que los niveles de 14 de los 15 pesticidas, incluyendo el glifosato, disminuyeron en los participantes que comenzaron a consumir alimentos orgánicos.

Si te interesa, puedes participar en un estudio de HRI Labs, y así poder identificar si tu mascota tiene alguna exposición a través del medioambiente o si necesita cambios en su alimentación (o ambas cosas, o en algunos casos, ninguna).

Recuerda siempre buscar el sello de la certificación orgánica USDA, en la comida de tu mascota. Si preparas su comida en casa, lo cual es una ventaja ya que puedes elegir los ingredientes, evita los aceites que contengan productos de maíz o soya, incluso si son orgánicos.

Los aceites vegetales orgánicos, incluso si no contienen glifosato, no son biológicamente adecuados para tu mascota carnívora. El maíz y la soya como fuentes de carbohidratos, no son apropiados para tu perro o gato.

Si la alimentación de tu mascota es a base de granos y rica en carbohidratos, lo mejor es que le des una alimentación cruda y deshidratada, o alimentos poco cocinados, sin granos ni ingredientes genéticamente modificados.

Cómo reducir la exposición ambiental al glifosato

A continuación, te muestro algunas medidas sencillas para ayudar a reducir el riesgo de exposición al glifosato de tu mascota:

No apliques productos químicos en tu patio ni en tu jardín. Utiliza productos para el jardín más naturales, en lo personal yo uso productos orgánicos. Y ten en cuenta que, aunque tu utilices productos orgánicos, tu vecino podría fumigar con químicos que pueden contaminar tu propiedad y representar un riesgo para ti y tu mascota.
Evita que tu mascota se acerque a cualquier lugar al aire libre, a menos que estés seguro que no rociaron productos químicos. Si caminan por lugares que sabes o crees que fueron fumigados, asegúrate de enjuagarle las patas cuando regresen a casa. La mejor forma para eliminar los químicos es remojar sus patas en agua limpia. Si estuvo en lugares con pasto alto o maleza, lávale las patas completas.
Si vives en un edificio o un fraccionamiento en donde se aplican productos químicos en las áreas comunes, te recomiendo buscar un lugar pequeño que puedas desintoxicar después de que fumiguen. Riega el pasto para eliminar los químicos que aplicaron. Mantén a tu mascota junto a ti cuando salgan a caminar, hasta que lleguen a su destino. Esta es la mejor manera de evitar que tu mascota (y tú) caminen entre esos químicos tóxicos.
Te recomiendo quitarte los zapatos antes de entrar a tu casa, para evitar meter residuos de productos químicos.

Por qué es recomendable desintoxicar a tu mascota

Mi recomendación es que desintoxiques a tu mascota con regularidad. La frecuencia y el tipo de desintoxicación depende del nivel de exposición a los productos químicos. Si tu mascota se expone a sustancias químicas tóxicas durante todo el verano, lo mejor es desintoxicarla todos los días.

Pero, si solo se expone, por ejemplo, debido a una pastilla contra el gusano del corazón, o si le aplicas un tratamiento con químicos para pulgas y garrapatas, lo ideal es desintoxicarlo una semana después de cada pastilla o del tratamiento. También te recomiendo que utilices productos naturales y sin químicos para pulgas y garrapatas.

Existen muchas hierbas y suplementos para desintoxicar a tu mascota. Si se trata de glifosato, los estudios demuestran que los suplementos de glicina, carbón activado, ácidos húmicos y fúlvicos y arcilla bentonita, son lo mejor para las mascotas.

La regla básica para la desintoxicación, es que no debería provocar ningún signo visible en tu mascota, incluyendo vómitos, diarrea o cambios en su comportamiento.