HISTORIA EN BREVE
- Existen algunos alimentos para humanos que son muy tóxicos para las mascotas, mientras que existen otros que aparte de ser seguros también son muy nutritivos
- Los alimentos que deben mantenerse fuera del alcance de los miembros peludos de la familia incluyen el endulzante xilitol, el chocolate en cualquier forma, las uvas, las pasas, las nueces de macadamia y los huesos cocidos
- Los alimentos que puedes (¡y debes!) poner a disposición de tu mascota, en pequeñas cantidades, incluyen manzanas, moras azules, zanahorias y vegetales fermentados
Por la Dra. Karen Shaw Becker
Bienvenidos al segundo día de nuestra semana de aniversario. Hoy hablaré sobre los alimentos para mascotas y los alimentos para humanos, aquellos alimentos que nunca debes ofrecerle a tu perro o gato y los que son seguros y muy nutritivos.
10 alimentos que son peligrosos para las mascotas
1. Xilitol. El xilitol (o "azúcar de abedul") es un endulzante natural que es muy tóxico para las mascotas; además, cada vez es más común en los productos ya que es igual de dulce que la sacarosa, pero con solo dos tercios de las calorías del azúcar. Es más barato que otros sustitutos de azúcar y en algunos casos tiene mejor sabor. También puede causar poca o ninguna liberación de insulina en humanos.
Hace unos años, el xilitol podía encontrarse en menos de cien productos en los Estados Unidos, ahora está presente en muchos productos para la salud y belleza, productos alimenticios, medicamentos, así como suplementos de venta libre y medicamentos recetados.
Debes estar al tanto de cualquier producto en tu hogar que contenga xilitol, especialmente en cualquier cosa que quieras ofrecerle a tu perro (o gato). Aquí podrás encontrar una lista completa de productos con xilitol.
2. Cafeína. La mayoría de las personas saben que el chocolate es tóxico para las mascotas. El chocolate contiene sustancias conocidas como metilxantinas, que no solo incluyen teobromina sino también cafeína. Tanto la teobromina como la cafeína estimulan el sistema nervioso central y el músculo cardíaco. Además, pueden relajar los músculos lisos, en especial los músculos de los bronquios, así como aumentar la producción de orina en los riñones.
Si tu perro (o mucho menos probable, tu gato) toma uno o dos sorbos de tu café por la mañana, es poco probable que se enferme. Sin embargo, consumir los restos del café, bolsitas de té negro o verde o pastillas de dieta o analgésicos con cafeína (aunque solo sean uno o dos) podría ser algo mortal para los perros pequeños. Dependiendo de la cantidad consumida, los síntomas pueden ser leves, como inquietud y una frecuencia cardíaca un poco elevada, hasta mortales.
Si crees que tu mascota podría haber consumido algo con cafeína, busca inmediatamente atención veterinaria de emergencia. Puedes inducir el vómito y administrar carbón activado para desintoxicarlo. También, podría necesitar cuidados de apoyo (como suministro de líquidos y medicamentos por vía intravenosa, para estabilizar la frecuencia cardíaca y la presión arterial) en función de los síntomas de tu mascota.
3. Chocolate. El chocolate está hecho de las semillas tostadas del Theobroma cacao o árbol del cacao. Las semillas tienen ciertas propiedades que pueden ser tóxicas para las mascotas, incluyendo la cafeína y la teobromina (ver arriba), que son estimulantes naturales.
Los estudios demuestran que los perros son muy sensibles a la teobromina, en comparación con otras mascotas. Esto se debe a que metabolizan la sustancia con mucha lentitud, lo que significa que permanece en el torrente sanguíneo durante un tiempo inusualmente prolongado.
Incluso las pequeñas cantidades de chocolate pueden causar reacciones adversas en las mascotas, y cuanto más oscuro sea el chocolate, contendrá mayor cantidad de teobromina. El chocolate Baker, chocolate semidulce, cocoa en polvo y chocolate oscuro gourmet son más peligrosos que el chocolate con leche. Otras fuentes incluyen a las multivitaminas masticables con sabor, productos horneados, granos de espresso cubiertos de chocolate y cocoa en polvo.
Aunque no es común, en este caso el peor alimento podría ser la cocoa en polvo, ya que contiene la mayor cantidad de teobromina por onza: 800 miligramos por onza, en comparación con el chocolate de repostería, que contiene 450 miligramos por onza.
4. Cebollas y otras plantas que contengan allium. Las plantas del género allium, que incluyen cebollas, cebollines, ajo y puerros, ya que enferman a algunas mascotas (incluso existen casos de muertes), mientras que otras no parecen afectadas. Los síntomas de intoxicación causados por estos vegetales pueden ocurrir uno o varios días después del consumo, dependiendo de la cantidad que haya consumido.
Los compuestos tóxicos presentes en los vegetales Allium son los organosulfóxidos. Cuando se mastican, los organosulfóxidos se convierten en una mezcla de compuestos de azufre que pueden dañar los glóbulos rojos. De acuerdo con LiveScience:
"Si [un] perro o gato consume un trozo de cebolla (en especial, 5 gramos de cebolla por kilogramo de peso corporal para gatos, o de 15 a 30 gramos por kilogramo de peso corporal para perros), puede haber cambios peligrosos en su sangre".
El ajo puede causar cambios en los parámetros sanguíneos cuando lo comen en cantidades muy grandes (mucho más de lo que las mascotas consumirían de forma natural) o si se administra en forma de suplemento de ajo (que no recomiendo). Los perros pueden consumir un cuarto de cucharadita de ajo recién picado por cada 6.8 kilogramos de peso corporal (15 libras) y obtener beneficios significativos, pero no se recomienda que coman mucho.
5. Uvas y pasas. En 2016, entrevisté a Melissa Gardner, especialista en inteligencia del FBI y exoficial de inteligencia militar. Ella ofreció una teoría muy interesante y plausible que explica por qué las uvas y las pasas, que alguna vez fueron seguras para las mascotas, ahora son tóxicas. Ella cree que se debe a los pesticidas a base de fluoruro que se han utilizado en las vides.
De acuerdo con los estudios, las uvas, las pasas, las sultaninas y las grosellas, tanto crudas como cocidas, podrían causar insuficiencia renal en los perros. Sin embargo, no todos los perros tienen la misma reacción a estos alimentos. Por ejemplo, un estudio que analizó 180 casos de perros que consumieron uvas y frutas relacionadas, informó que algunos perros no presentaban síntomas después de consumir 907 gramos de pasas (2 libras), mientras que otros morían después de comer tan solo un puñado.
Esta información parece sustentar la teoría de Gardner que habla sobre la forma en que se cultivan las frutas y que ésta podría causar esta toxicidad y no la fruta en sí.
Por desgracia, con base en lo que Gardner descubrió durante su investigación y lo que otros investigadores han descubierto sobre los niveles de ácido tartárico, tampoco podemos asumir que las pasas orgánicas o las uvas sean seguras, así que mi recomendación es evitar darle a tus mascotas uvas, pasas y frutas relacionadas.
6. Alcohol. La intoxicación por alcohol (etanol) por lo general ocurre cuando una mascota (en especial un perro) prueba una bebida alcohólica. La toxicidad también ha ocurrido en perros que comieron manzanas podridas, bayas de endrino (endrino) y pan y masa de pizza cruda, todos los cuales contienen alcohol. Otras fuentes potenciales de etanol incluyen pintura y barniz, ciertos medicamentos, perfumes/colonias, enjuagues bucales y ciertos tipos de anticongelantes.
Cuando una mascota consume alcohol su tracto gastrointestinal (GI) lo absorbe muy rápido y llega al cerebro, algo que sucede de igual forma en los humanos. Los síntomas se desarrollan en un corto período de tiempo e incluyen depresión, pérdida de coordinación, letargo, sedación, mayor temperatura del cuerpo, respiración lenta y coma.
7. Nueces de macadamia. Las nueces de macadamia son los únicos frutos secos que las mascotas deben evitar, ya que pueden causar un profundo malestar gastrointestinal, incluso en cantidades muy pequeñas. Y, aunque no se ha identificado una toxina específica, los síntomas pueden ocurrir dentro de 12 horas después del consumo y pueden incluir debilidad en las patas traseras, vómitos, rigidez y pérdida de coordinación, temblores, fiebre, dolor abdominal y membranas mucosas pálidas.
8. Masa de pan. Casi toda la masa de pan contiene levadura y, cuando se expone a un ambiente cálido y anaeróbico (como el horno o el interior del miembro peludo de tu familia), las enzimas de la levadura convierten el azúcar de la masa en etanol (alcohol) y dióxido de carbono. El dióxido de carbono es lo que hace que la masa esponje, mientras que el etanol le otorga sabor al pan, conforme se evapora durante el proceso de cocción.
Existen dos preocupaciones para una mascota que ha comido masa de pan. En primer lugar, tenemos este gran cúmulo de masa en el estómago que continúa aumentando de volumen, lo que no solo podría incomodar a tu mascota, sino también podría desgarrar su estómago o intestino. En segundo lugar, el ambiente cálido del estómago puede promover la fermentación continua del alcohol en la masa, lo que podría provocar toxicosis por etanol.
9. Huesos cocidos. Los huesos cocidos son peligrosos para perros y gatos porque tienden a astillarse. La mayoría de los veterinarios han realizado cirugías para extraer fragmentos, astillas y obstrucciones de los animales de compañía que consumieron huesos cocidos. Por desgracia, algunos casos han sido fatales.
Dicho esto, es importante tener en cuenta que los ancestros de tu perro y sus contrapartes en la naturaleza han consumido huesos crudos toda la vida. Los caninos en su hábitat natural comen presas, incluyendo la carne, vísceras, huesos y el contenido intestinal. De hecho, tu mascota tiene requisitos biológicos de los nutrientes presentes en la médula ósea y huesos.
A los perros también les encanta masticar huesos crudos por su delicioso sabor, estimulación mental y porque todo ese roer es un gran ejercicio para los músculos de la mandíbula. Así que, ten cuidado y solo ofrécele a tu perro huesos crudos , ya sean comestibles o recreativos.
10. Alimentos humanos azucarados, salados, grasos y procesados. Los restos de las comidas festivas de no son malos para tu mascota, dependiendo de en qué consista la comida y qué ingredientes se utilicen. Por ejemplo, la carne cocida (sin condimentos ni aderezos añadidos) es buena para perros y gatos. Los vegetales, cocidos o crudos (sin saborizantes ni aditivos de ningún tipo) también los puedes compartir con tu mascota (pero te recomiendo evitar las cebollas).
Los ejemplos de alimentos para personas que debes evitar darle a tu mascota incluyen todos los alimentos fritos, aderezos (rellenos) y pastas; alimentos procesados o azucarados; pan, bollos y todos los postres. Además, es mejor mezclar una pequeña porción de comida segura para personas con la comida regular de tu mascota y dársela a la hora de su comida habitual.
También puedes utilizar tus sobras de comidas saludables como golosinas de entrenamiento durante todo el día. Para evitar conductas de mendicidad, no le des nada a tus mascotas cuando estés comiendo, estés en la cocina o cuando prepares o limpies la cocina.
Qué hacer si sospechas que tu perro pudo intoxicarse
Si sospechas que tu perro o gato consumió veneno y tienes preguntas o necesitas orientación, y vives en los Estados Unidos, puedes llamar a la línea directa del ASPCA, que es el Centro de Control de Venenos al 1-888-426-4435, o a la Línea de ayuda para mascotas envenenadas al 1-855-764-7661. Se puede contactar a ambas líneas directas las 24 horas del día, los 7 días de la semana, los 365 días del año.
Si estás seguro de que tu mascota ha estado expuesta a una toxina, debes llevarla con tu veterinario o acudir al hospital de urgencias de inmediato. Si conoces o sospechas cual podría ser la sustancia que consumió, no dudes en llevarla a tu visita al veterinario.
10 alimentos que puedes compartir de manera segura con tu mascota
Aparte de la lista anterior de los alimentos que debes evitar de la que hablamos anteriormente, puedes ofrecerle a tu mascota un bocado de las frutas y vegetales frescos que comes. La mayoría de los siguientes alimentos serán más populares en los perros que en los gatos, pero son seguros para ambos. Asegúrate de servirlos solos (sin azúcar, sal ni especias, mantequilla u otros aditivos), con moderación y en porciones pequeñas. Recuerda que los alimentos orgánicos reducen la exposición a contaminantes y residuos.
1. Manzanas. Las manzanas contienen poderosos antioxidantes y vitamina C. Ofrécele a tu mascota rodajas de manzana, pero nunca el corazón ni las semillas.
2. Espárragos. Los espárragos son una excelente fuente de vitaminas K, A, B1, B2, C y E, junto con folato, hierro, cobre, fibra, manganeso y potasio. Pero, sobre todo, ¡fibra prebiótica que forma microbiomas!
3. Moras azules. Las moras azules frescas o congeladas contienen fitoquímicos y su tono azul profundo es el resultado de las antocianidinas, que son poderosos antioxidantes. Las moras azules también son una buena fuente de fibra saludable, manganeso y vitaminas C y E.
Las moras azules están disponibles todo el año y son excelentes premios de entrenamiento para perros. Puedes darle de 2 a 4 moras azules al día en forma de premio por cada 4.5 kilogramos de peso (10 libras) de tu perro. Reemplazar alguno de los premios procesados que le das a tu mascota cada día con moras azules frescas o congeladas es una excelente manera de aumentar el contenido de antioxidantes en la alimentación de tu mascota.
4. Brócoli. El brócoli apoya los procesos de desintoxicación; contiene fibra saludable para ayudar a la digestión; es rico en nutrientes beneficiosos como potasio, calcio, proteína y vitamina C. Además, tiene propiedades antiinflamatorias, apoya la salud ocular, ayuda a reparar el daño de la piel y apoya la salud del corazón.
Aunque siempre recomiendo comprar los productos orgánicos locales, en el caso del brócoli, no tienes que comprar orgánico ya que es uno de los alimentos más limpios (sin pesticidas). Tal vez tu mascota prefiera el brócoli al vapor, aunque muchos perros se lo comen fresco sin ningún problema. Los tallos de brócoli picados también ayudan a desintoxicar.
5. Zanahorias. Las zanahorias contienen pocas calorías y mucha fibra, fitonutrientes y vitaminas. Muchos perros disfrutan comer una zanahoria fresca y crujiente, y algunos incluso se comen los tallos. Una minizanahoria se puede cortar en aros finos que producen 4-6 golosinas de entrenamiento.
6. Pepino. Este vegetal crujiente mantiene a las mascotas hidratadas, y debido a que contienen mucha agua, son bajos en calorías. Los pepinos también contienen cucurbitacina, que tiene potencial anticancerígeno, antiaterosclerótico y antidiabético.
7. Kéfir. El kéfir orgánico sin endulzar tiene un alto contenido de calcio y proteínas, pero también proporciona bacterias intestinales "buenas" y más beneficiosas que el yogur. El kéfir es fácil de hacer en casa y es un complemento excelente para cualquier alimento para mascotas o se sirve en un tapete para lamer.
8. Vegetales fermentados. Los alimentos fermentados son potentes desintoxicantes y contienen niveles muy altos de probióticos y vitaminas. Las bacterias intestinales beneficiosas por los probióticos descomponen y eliminan los metales pesados y otras toxinas del cuerpo y realizan otras funciones importantes.
Agregar 1 a 3 cucharaditas de vegetales fermentados a la comida de tu mascota cada día (dependiendo de su peso corporal) es una excelente manera de proporcionarle probióticos a base de alimentos y nutrientes naturales. Descubre más sobre este poderoso complemento a la alimentación de tu mascota.
9. Ejotes o habichuelas. Los ejotes frescos cultivados de forma local son una fuente de vitaminas A, C y K. También aportan calcio, cobre, fibra, folato, hierro, niacina, manganeso, potasio, riboflavina y tiamina, así como betacaroteno. Un ejote picado produce de 3 a 4 golosinas de entrenamiento del tamaño de un bocado, una recompensa baja en calorías perfecta para perros con sobrepeso.
10. Col rizada. Este vegetal crucífero de color verde oscuro contiene vitaminas (en especial vitaminas K, A y C), hierro y antioxidantes. Ayuda a desintoxicar el hígado y también tiene propiedades antiinflamatorias. Agrega 1 a 3 cucharadas de col rizada picada (cruda o al vapor) a la comida de tu mascota, según su peso corporal, como una gran fuente de fibra, nutrientes y antioxidantes de alimentos enteros.
